Detección de alteraciones genéticas (cromosómicas y génicas) en embriones logrados por fecundación in vitro para mejorar los resultados reproductivos y disminuir el riesgo de enfermedades genéticas en la descendencia.
Permite identificar la paternidad mediante una simple extracción de sangre materna e hisopado bucal del presunto padre. A partir de la semana 8 de embarazo con una sensibilidad del 99,99 %.
Estudio genético del material de aborto para un correcto asesoramiento, evitando la realización de estudios y tratamientos innecesarios. Diagnóstico y resultados en el 95% de los casos.